En los últimos años, la contaminación del aire en Guatemala ha experimentado un aumento preocupante, con consecuencias negativas para la salud pública y el medio ambiente. Este problema se agrava debido a una serie de factores interrelacionados, entre los cuales destaca el rol de la energía y su impacto en la contaminación atmosférica.

Adicionalmente, los recientes incendios en Guatemala, incluyendo aquellos en el vertedero de Villanueva y en el volcán de Agua, han empeorado significativamente la calidad del aire en la capital. 

Todos estos eventos liberan material particulado, también llamado contaminación por partículas, que son una mezcla de partículas sólidas y gotas líquidas que se encuentran en el aire, incluyendo PM 2.5 (partículas inhalables de 2.5 micrómetros y menores), y material particulado 10 (partículas inhalables de 10 micrómetros y menores).

Además, se liberan otros gases nocivos como el monóxido de carbono y el dióxido de azufre, contribuyendo a una atmósfera cada vez más contaminada.

El rol de la energía en la contaminación del aíre

La energía abarca una amplia gama de conceptos y contextos en diversos campos de la ciencia y la tecnología. 

En la generación de electricidad utilizamos distintas fuentes, en ese sentido, debemos observar que, según un reciente estudio publicado por la Central American Business Intelligence (CABI), en Guatemala el 9.3% de la oferta de energía eléctrica en el país proviene de combustibles fósiles y el 21% de carbón, contribuyendo a las emisiones.

Sin embargo, cuando hablamos del rol de la energía en la contaminación del aire y el PM2.5, es importante resaltar el tema de la movilidad y las fuentes utilizadas para el transporte urbano.

El Papel del Transporte en la contaminación del aire en Guatemala

El transporte terrestre se ha identificado como uno de los principales impulsores de la contaminación del aire en Guatemala. 

Como importador neto de combustibles fósiles, el país enfrenta una situación donde la mitad de las emisiones provienen del transporte. La mala combustión de estos combustibles contribuye significativamente a la acumulación de material particulado en la atmósfera.

Particularmente el PM2.5 se genera por la mala combustión de combustibles fósiles y el exceso de quema de estos. Actualmente Guatemala registra más de 5 millones de vehículos activos, el cual, debido a pocas soluciones en el sistema de trasporte público colectivo, tiende a subir y se proyectan 7.5 millones para 2030. 

Estrategias para Mitigar la Contaminación

Para abordar esta problemática, se requieren medidas urgentes y efectivas. 

Entre ellas se destacan: 

  • Mejorar la gestión de los vertederos para prevenir incendios, 
  • Promover el transporte público eficiente, seguro y sostenible
  • Incentivar la movilidad sostenible con alternativas como la movilidad eléctrica y el uso de biocombustibles como el etanol
  • Fomentar la movilidad no motorizada.

 

Consecuencias de la Inacción

Según señala la OMS, las personas más vulnerables a nivel mundial son aquellas con enfermedades preexistentes, los niños menores de cinco años y los adultos de entre 50 y 75 años, experimentan un mayor impacto. 

Los efectos de la contaminación atmosférica se manifiestan tanto a corto como a largo plazo, siendo la exposición prolongada la más perjudicial para la salud pública, destaca la OMS. La mayoría de las muertes atribuibles a la contaminación del aire están relacionadas con enfermedades crónicas no transmisibles. Por ejemplo, se estima que un porcentaje significativo de casos de cáncer de pulmón, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), accidentes cerebrovasculares y cardiopatías isquémicas son consecuencia de la contaminación atmosférica. 

Sin embargo, el impacto más grave recae en la mortalidad infantil, dado que más del 50% de las muertes de niños menores de 5 años debido a infecciones agudas de las vías respiratorias inferiores están vinculadas a la inhalación de partículas contaminantes presentes en el aire interior, resultado del uso de combustibles sólidos.

Un Llamado a la Acción

Es imperativo que el gobierno y los diversos actores de la sociedad guatemalteca tomen medidas inmediatas para abordar la contaminación del aire. La implementación de políticas y acciones concretas es esencial para proteger la salud y el bienestar de la población, así como para preservar el medio ambiente para las generaciones futuras.