Según el Banco Mundial, cada año se generan 2.010 millones de toneladas de desechos sólidos, de los cuales un 33% de ellos no son tratados de forma correcta, lo que implica que va al medioambiente, y se estima que para el año 2040 los desechos lleguen a unas 3.417 toneladas.
Estudios realizados por el Banco Mundial muestran una alarmante cifra: cada día, un guatemalteco genera 0,47 kg en basura, lo que muestra la importancia de minimizar residuos de una forma efectiva y urgente para evitar daños al medioambiente, a la sociedad actual y a generaciones futuras.
De hecho, de toda esa cantidad de residuos generados, el 33% se deposita en vertederos, se quema, se arroja al mar o se abandona en cualquier lugar, causando contaminación, emisiones de gases de efecto invernadero, pérdida de recursos y riesgos para la salud humana y la biodiversidad.
En cbc entienden que esta es una alarma mundial que las empresas, la sociedad y los gobiernos debemos atender con prontitud.
Y, por esta razón, se ha implementado una política de manejo de residuos basada en los principios de Carbon trust standard, Zero Waste To Landfill, la cual les ha hecho merecedores de diferentes reconocimientos, entre los que destaca el ESG BOND DEAL OF THE YEAR AWARD de 2022.
Ahora bien, ¿qué implica para las personas en casa y las empresas minimizar residuos? ¿Cómo pueden conseguirlo y cuidar el medio ambiente? ¿Qué beneficios reporta esto? Veamos.
¿Qué implica minimizar residuos?
Minimizar residuos significa adoptar medidas para reducir la cantidad y la peligrosidad de los residuos orgánicos e inorgánicos que se generan, tanto en el ámbito doméstico como en el industrial.
Implica cambiar hábitos de consumo, optar por productos más duraderos, reutilizables y reciclables, evitar el desperdicio de alimentos y materiales, y separar correctamente los residuos para facilitar su tratamiento y aprovechamiento.
¿Cómo minimizar residuos en la vida diaria?
Existen muchas acciones que podemos realizar en nuestro día a día para lograr la minimización de residuos sólidos que producimos y enviamos a vertederos. Algunas de ellas son:
- Comprar solo lo que necesitamos y evitar el sobreempaquetado. Elegir productos a granel, con envases retornables o reciclables, y llevar nuestras propias bolsas reutilizables al hacer las compras.
- Reparar, reutilizar y donar los objetos que ya no usamos, en lugar de tirarlos. Podemos darles una segunda vida, transformarlos en algo nuevo o regalarlos a alguien que los necesite.
- Compostar los residuos orgánicos, como restos de frutas, verduras, cáscaras de huevo, café, té, etc. De esta forma, podemos obtener un abono natural para nuestras plantas y reducir el volumen de basura que generamos.
- Reciclar los residuos que no se pueden evitar, como el papel, el cartón, el plástico, el vidrio, el metal, etc. Para ello, debemos separarlos correctamente y depositarlos en los contenedores adecuados o en los puntos limpios más cercanos.
- Reducir el consumo de energía y agua, utilizando electrodomésticos eficientes, apagando las luces y los aparatos que no se usen, aprovechando la luz natural, instalando sistemas de ahorro de agua, etc.
¿Cuáles son los residuos domiciliarios que podemos reducir?
Para establecer un buen plan de minimización de residuos, es importante primero conocer qué tipo de residuos podemos reducir en casa.
Recordemos que los residuos domiciliarios son aquellos que se generan en los hogares, como resultado de las actividades cotidianas de las personas, es decir, aquellos que se general al preparar alimentos, al aplicar higiene, etc.
En este sentido, existen tres tipos de residuos domésticos que se deben controlar:
- Residuos orgánicos: son los que provienen de la materia viva, como los restos de alimentos, las hojas, las flores, etc. Estos residuos se pueden reducir evitando el desperdicio de comida, planificando las compras y las comidas, conservando adecuadamente los alimentos, y compostando los residuos que se puedan aprovechar.
- Residuos inorgánicos: vienen de la materia inerte y son más frecuentes cada día que pasa, como el papel, el cartón, el plástico, el vidrio o el metal. Para reducirlos de forma sencilla y sin un fuerte impacto para el día a día, se puede evitar el uso de productos desechables, como platos, vasos, cubiertos, pajillas, etc., prefiriendo los productos con envases reciclables o retornables, y reciclando los residuos que se puedan recuperar.
- Residuos especiales: nos referimos a todos aquellos que requieren un tratamiento específico por su peligrosidad o su composición. Por ejemplo, las pilas, las baterías, los medicamentos, los aerosoles, los aceites, los productos de limpieza, etc. En cbc recomendamos sustituir estos productos por alternativas ecológicas, y entregándolos en los puntos de recogida autorizados, de manera que no vayan a parar a los vertederos o el ambiente.
Las empresas también pueden minimizar los residuos que envían a vertederos
Gran parte de los residuos sólidos que se generan en la actualidad provienen del comercio y de empresas manufactureras.
En este sentido, hemos descubierto que el manejo adecuado de estos materiales es más sencillo de lo que parece, ya que se pueden realizar estas simples acciones para minimizar residuos en las calles y lograr la sostenibilidad:
- Realizar un diagnóstico de la situación actual de la generación y gestión de los residuos.
- Establecer objetivos y planes de acción para reducir la generación de residuos, mejorar la eficiencia de los procesos, optimizar el uso de los recursos, incorporar criterios de ecodiseño, y fomentar la innovación y la mejora continua.
- Implementar buenas prácticas de gestión de residuos, como la segregación en origen, la reutilización, el reciclaje, la valorización energética, y la eliminación controlada de los residuos que no se puedan aprovechar.
- Sensibilizar y capacitar al personal sobre la importancia de la minimización de residuos.
- Comunicar y difundir los resultados y los beneficios de la minimización de residuos, tanto interna como externamente.
Beneficios de la minimización de residuos en la vida diaria y la industria
Pero no queremos cerrar esta noticia sin mencionar los enormes beneficios de los que se pueden disfrutar con la minimización de residuos:
- Ahorro de costos y dinero.
- Ahorro de energía y de recursos naturales.
- Prevención de la contaminación y la degradación ambiental.
- Mejora de la salud y el bienestar.
- Mejora de la imagen y la reputación.